Julio Alberto Ruiz Díaz, de 60 años, trabaja y administra una huerta familiar en el sur de nuestra localidad, sobre terrenos fiscales cedidos por un intendente, asegura temer por su vida ya que ha sido amenazado.
Por Emanuel N. Soverchia
Ubicado en calle Cochabanba entre
Bv. Lopez y Roldán se encuentran los terrenos donde desde hace más de 15
años, Julio y parte de su familia trabajan su huerta como emprendimiento y sustento,
labor que conlleva arado, siembra y
cultivo para comercializar en la ciudad. Las tierras abarcaban en principio 170 metros
por 70 metros, cedido por la intendencia de Amilcar Abate, años antes del
proceso de la crisis del 2001, con documento firmado corroborando el permiso; comprobante que se quedó luego la
intendenta Stella Clerici cuando el horticultor reclamo energía eléctrica. En
la actualidad durante la gestión de Clerici se usufructuaron parte los terrenos
destinados a la obra Plan Mi Lote, reduciendo así, gran parte de la huerta (70
metros por 18 metros). Fabián Speca entregó un nuevo documento en carácter de
declaración jurada firmado por Julio Ruz Diaz y el abogado Martín A. Vodanovich
de la municipalidad de Cañada de Gómez, fechado el 21 de enero de 2013 que
abala la estadía legal de del horticultor.
Pero el problema mayor que
enfrenta Julio y su familia es otro más grave; un vecino afirma ser heredero
por haberse criado en el lugar; éste sostiene que Ruiz Díaz debe desalojar el predio porque no
le pertenece.
- “Me dijo que si no me iba me pegaría dos tiros con la escopeta”. argumentó
Julio a El Informe.
Continuó: -“Hice la denuncia y tengo entendido que fue citado… pero no sé qué pasó
luego”
Hoy Julio, ex albañil retirado
por hipertensión, padre de dos hijos
adultos se gana la vida con la venta del cultivo de su huerta y además es
cartonero y botellero, profesiones éstas paridas por las gestiones financieras que abogaron “El
corralito”; argumenta que los vecinos saben que sus terrenos siempre están
limpios y mantenidos en condiciones. Además después de la amenaza Julio tuvo
que armar su precaria casa de chapas y bolsas plásticas donde vive dentro del
predio de la huerta para custodiar el lugar; dejar asentado en la comisaría
segunda que en los momentos de ausencia estaría realizando trabajos de
jardinería; concluyendo que culminó siendo esclavo de su propia necesidad.
En una mañana de sábado
cualquiera gente vinculada al amenazante vecino aprovechando la ausencia de
Julio, cortaron el alambrado y depositaron dentro de las instalaciones de la
huerta montículos de escombros en varios lados del predio; se cree que fue una
manera de intimidación.
Proseguía Julio: “Yo de acá no voy a moverme, si alguien quiere
que me vaya, creo que la municipalidad debería intervenir… y por favor que
nadie siga molestando; si quieren hablar que vengan con los papeles
comprobantes”.
Todas las denuncias
correspondientes están asentadas en la comisaría segunda de la ciudad de Cañada
de Gómez.
Fuente: Periódico El Informe de
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