La semana pasada
las intensas lluvias azotaron a Cañada de Gómez arrojando como resultado varias
zonas de la ciudad bajo el agua. Los vecinos hartan de lidiar con este problema
dialogaron con nosotros y enviaron imágenes del desastre.
Por
Emanuel N. Soverchia
Precisamente el día
sábado 26 fue el más recordado por los vecinos que a raíz de ver sus barrios
inundados se comunicaron con nuestra redacción en busca de hacer oír de su voz
y que se solucionen de una vez por todas estos inconvenientes que datan de
años.
Los vecinos no sólo
expresaron su descontento con la falta de atención de las autoridades
pertinentes sino además nos enviaron imágenes fotográficas del mismo momento
que el agua invadía sus hogares. La desolación, el enojo y por momentos la
tristeza, eran causa común para los cañadenses aquel día.
Hemilce, una vecina
de la zona norte de la ciudad comentó a El Informe: -“Cada vez que llueve así quedan las calles Santa Rosa y Alvear (muestra
fotos de la zona inundada) las cunetas tapadas; la verdad que cansados de esto
se olvidaron que por acá vive gente”
Continuó: “La
semana pasada andaban los de la municipalidad cortando el pasto; la verdad una
vergüenza, estuvieron sentados toda la mañana tomando mate y nos tapaba el
pasto. Tuvimos que cortar nosotros el
pasto porque ellos después de tomar mates se fueron y nunca hicieron nada…”
Los cañadenses
parecen estar cansados ya de reclamar constante a la Municipalidad por mejoras
en los servicios públicos que deberían ser óptimos para una mejor calidad de
vida; puesto que las autoridades hacen oídos sordos a estas demandas creando un
clima hostil y poco feliz para los ciudadanos.
Por su parte, Jesica
otra vecina de la ciudad pero en este caso vive en la zona sur comentó a
nuestro medio: “Después de aquella nota que hiciste a los vecinos de Castelli al 400
hace ya muchos meses, todavía seguimos con el problema de las zanjas sucias.
Nunca apareció la municipalidad. Hace una hora que empezó a llover fuerte y ya
tenemos el agua en la vereda. Los vecinos tratan de limpiar la zanja pero no se
puede porque es un trabajo que tiene que hacerse cuando la zanja esté seca. Hay
que limpiar los tubos... si querés publicarlo. A lo mejor algún día nos llevan
el apunte…”
“¡Sin mencionar que hace dos meses que tenemos
la luz de la media cuadra rota y no vienen a arreglarla! si no hacen eso; imagino
que limpiar la zanjas mucho menos… La verdad que los
reclamos no sirven para nada. Ya no sabemos que hacer”.
– expuso resignada
la mujer.
Agregó Jesica: - “Solo
se les pide que hagan lo que les corresponde. Imaginate que hace dos meses que está
rota la luz de enfrente de casa. Hago el reclamo y me dicen que lo suman a la
lista. Que pronto lo solucionan. ¡Unos días más y le festejamos el tercer
cumple-mes!
“Pero el alumbrado
público hay que pagarlo todos los meses. Una vergüenza. Mientras siga lloviendo
el agua va a seguir subiendo, espero que al vecino de al lado no le haya
entrado, su casa está más baja que la mía” – se lamentaba Jesica.
En simultaneo, iban
llegando infinidades de fotografías y quejas hacia la actual gestión municipal
a medida que el agua aumentaba de volumen
en los barrios de nuestra localidad; era evidente que toda la ciudad
estaba siendo diezmada por los anegamientos, como ya vienen sufriendo los
vecinos desde hace más una década.
Luis, un vecino de
otro sector de la zona sur; nos escribió alertando que las anegaciones estaban
siendo cada vez más peligrosas: “Te paso fotos de cómo está la esquina de
Rawson y Patagonia. Está llegando el agua a las casas…” (Fotos)
Era alarmante
recibir constantemente en nuestros correos imágenes y quejas, enojos
desesperación y todas desembocaban en desilusión por parte de los vecinos al
notar que los funcionarios; hacían caso omiso, no atendiendo los repetidos
llamados de los cañadenses buscando al menos ser escuchados.
“Los de la
Municipalidad no fueron nunca cuando se nos inundó la calle, el agua llegaba
hasta las casas; a mi vecino de la esquino le entró en la pieza, y hoy la calle
es barro puro. El problema es que la calle Rawson es más alta que calle
Patagonia, entonces el agua vuelve y nunca lo solucionaron…” – explicó Luis, quien además
recordó: - “El otro día que hubo mucho viento, se cayó un árbol y hasta el día de
hoy sigue ahí”.
Las redes sociales
fueron otras de las vías de comunicación en donde los vecinos plasmaron allí su
preocupación en alerta por las anegaciones. Los cañadenses no dejan de recordar
aquél fatídico 22 de noviembre de 2000, cuando la trágica inundación, dejó como
resultado muertes, desamparo y casi toda zona sur de nuestra ciudad diezmada
por el desborde del arroyo. Ese día viene a la memoria de cada ciudadano cuando
las lluvias comienzan a caen incesantemente y los barrios empiezan a inundarse.
“Yo tengo terror
porque en el 2000 es el barrio sur en Cañada nos inundamos esta mañana estaba
nerviosa por más que me digan que esta la represa, tengo pavura”. – comentó Alba en Facebook.
Añadió: “La
ayuda solidaria es lo que te dan, que es sobras, para conformarte y no te
alcanza ni un bidón de agua, yo estoy a
tres cuadras del arroyo en el lugar más bajo y en aquella época se quedaron con
plata de los inundados, y bien gracias”
“Igual que el
mejorado que hicieron, ¿dónde se ha visto que en un mejorado se pasa la máquina
para arreglar las calles? Todos los
escombros sueltos, es vergüenza ajena; vengan un día de lluvia a ver si pueden
pasar. Es un chocolate y la mayoría de los chicos que van al colegio son de
detrás de las vías; no puede ir nadie…
gracias vamos a llamar al cable para que filmen hay veredas rotas y se necesita
hacer un zanjón, que el agua se estanca”. - Culminó Alba en las redes
sociales.
Fuente: Periódico El Informe de la Ciudad
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