viernes, 15 de febrero de 2019

“ME HICIERON SENTIR CULPABLE DE SER INSULINO DEPENDIENTE”

Una paciente del hospital “San José”  de Cañada de Gómez, describió a través de nuestro medio lo que está ocurriendo en el nosocomio local, con respecto a los insumos de insulina y las lapiceras Flexpen. En nuestro país padecen diabetes cerca de 1.570.000 personas.


Por Emanuel N. Soverchia

En la edición anterior de La Imprenta se publicó un artículo sobre un testimonio en referencia a una paciente insulinodependiente en cual manifestaba reclamos sobre las lapiceras Flexpen en la que argumenta que el estado dejaría de darles esos insumos para darles otros que lastiman el cuerpo y dejan grandes marcas. A raíz de esta divulgación periodística, otra paciente del Hospital “San José” de Cañada de Gómez, comunicándose con nuestra redacción,  solicitó contar su historia y la burocracia que debe afrontar cada vez que tiene que retirar su medicación.
Por su puesto, por pedido de la vecina, y por cuestiones de seguridad, no revelaremos la identidad de la paciente; sino simplemente daremos a conocer su testimonio.


La cañadense de 54 años con diagnóstico de Diabetes Tipo 2, narró los altibajos de tener que depender de insulina y cómo es vivir con la enfermedad que sufren cerca del 10% de los habitantes de nuestro país; en algunos casos más avanzados que otros, pero el flagelo es el mismo para todos quienes la padecen.

“Soy paciente insulina dependiente desde hace 5 años, pero mi enfermedad fue declarada hace más de 10, debo controlarme con el glucómetro y tener buena calidad de vida, estoy tratada y medicada a través del Hospital “San José” de Cañada de Gómez quienes me proveen la medicación. Últimamente ha aparecido, a mi entender, un tema de trasfondo entre el hospital y la provincia”.- expresó la mujer.

La diabetes es una enfermedad que deber ser controlada y el uso de su medicación es fundamental para que estos pacientes continúen con su vida en estado óptimo, la interrupción de las dosis podría tráeles consecuencias irreversibles y hasta provocarles la muerte. Según la tercera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, en Argentina se diagnostican 29 mil casos nuevos de diabetes tipo 2 al año y causa 15.400 muertes anuales.


Además, contó sobre problemas internos entre las entidades gubernamentales, que interfieren en los tratamientos: - “Yo tengo lápices de insulina, consumo 6 cada 30 días, aplicándomela 3 veces al día, los mismos los retiro en la farmacia del hospital periódicamente con receta; tengo que moverme con la medicación con cadena de frío, comprarme las agujas que llevan los lápices;  y ahora se está gestionando un trámite, en cual, hasta que salga y me lo otorguen, yo tengo que estar compensada con mi medicación, y veo que me tienen a las vueltas… estoy tratando de no quedarme sin medicación, porque la necesito… pienso que es un derecho que tengo; sin embargo escucho estos trasfondos que no debería estar escuchando, porque son problemas internos de las autoridades del hospital “San José” con su dependencia de la provincia”.

Agregó: -“Hablé con la médica auditora del Hospital, quien me está haciendo los trámites, pero a su vez yo estoy pidiendo que me cubra la insulina, espero que me la autorice hasta que lleguen los papeles; mientras tanto ella pretende que yo, a último momento, reponga mi medicación, y eso uno lo tiene que hacer con un lapso determinado, porque no me puedo quedar sin medicación un viernes a la noche y tener para sábado y domingo, hasta que vaya al hospital… es una forma de exigirme especule con la medicación; es una forma de especularme”.

En consecuencia esta vecina especificó de manera contundente su reclamo, e hizo reseña sobre su derecho a recibir los insumos pertinentes para equilibrar su salud y obtener una buena calidad de vida. También habló sobre su visita al municipio elevando su percance a las autoridades locales.

“En definitiva es que yo, como cualquier ciudadano de Cañada de Gómez que se hace atender en el Hospital, solicitar mi medicación y que me la den, nada más; pero no que me estén humillando… ‘ que la provincia…, que el presupuesto… entre tantas cosas…’ y que yo no lo tengo que aceptar, porque ese no es mi problema… yo no tengo prepaga y necesito de los insumos del hospital; ahora me encontré con esto, confié y veo que me están engañando, y me estoy quedando con poca medicación… y la necesito sin falta”. – definió la paciente del Hospital. Y señaló: -“Fui a hablar con la intendenta municipal, para explicarle mi problema de salud y estos trasfondos; ahí me contuvieron bien y me escucharon…”

Por ultimo, la paciente exteriorizó su estado de ánimo ante esta problemática, que no sólo la hace sentir humillada, sino que debe especular de alguna manera para no quedar sin medicación; como consecuencia de la ya clásica burocracia de los estamentos públicos estatales.

“Me siento totalmente humillada… y a las autoridades del Hospital “San José”  le digo que si no saben usar un puesto político, que se queden en sus casas; y si tienen vocación de ser empleados de una administración pública, que sepan hacerlo…”- Expresó la vecina que se atiende en el hospital local, y además aportó: “La gente que tiene esta enfermedad, les recuerdo, que uno no se la busca… y algunas oportunidades, en la asistencia pública me hicieron sentir culpable  por estar enferma y por ser insulina dependiente”.

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